viernes, 4 de septiembre de 2009

Nuevo proyecto para el otoño: club de lectura y cine, en Badajoz y Mérida



Con septiembre aparecen los nuevos proyectos, los propósitos que vamos a desarrollar esta temporada... Para no ser menos, me he puesto manos a la obra y ya me he lanzado a poner en marcha un nuevo. proyecto. A partir de octubre me encargaré de coordinar dos clubes de lectura y cine, en Badajoz y Merida, respectivamente, cuyo plazo de inscripción ya está abierto...

Por si alguien está interesado, aquí os incluyo algo de información:



¿Te gusta leer buenas historias y verlas reflejadas en el cine? ¿Te interesaría participar en un novedoso proyecto cultural que combina la literatura y el cine? Si la respuesta es afirmativa, ya puedes inscribirte en el nuevo club de lectura y cine “Leer en imágenes”, que dará comienzo a partir del próximo mes de octubre en la Biblioteca Pública de Badajoz “Bartolomé J. Gallardo” y en la Biblioteca Pública de Mérida “Jesús Delgado Valhondo”, respectivamente.

Las personas interesadas en participar tendrán que estar en posesión del carné de la biblioteca o solicitarlo en el momento de la inscripción, y rellenar el boletín de inscripción que encontrarán en las sedes de ambas bibliotecas.

También podrán enviar su inscripción por correo electrónico, en el que indicarán su nombre y apellidos, dirección, código postal, teléfono y dirección de correo electrónico. Quienes deseen participar en el de Badajoz deberán enviar el correo a la dirección biblioteca.badajoz@juntaextremadura.net, mientras que quienes quieran en el de Mérida deberán hacer lo mismo a la dirección biblioteca.merida@juntaextremadura.net.

Ambos clubes de lectura y cine surgen con la particularidad de que sus miembros leerán siempre obras literarias que hayan sido llevadas al cine o a la televisión. Se realizarán reuniones quincenales, en las que se comentará el libro, que previamente los integrantes del club se han llevado a casa y han leído. Tras su lectura, se proyectará la película y se debatirá la obra cinematográfica, en relación a la obra literaria.

Se trata, pues, de dos clubes que tratarán de analizar y comentar aspectos de la obra literaria, por un lado, y de, por otro, interpretar la película que se realizó a partir de ese libro. Por lo tanto, se compararán diferentes formas de contar historias: desde la perspectiva literaria, con su propio estilo y sus recursos; y la cinematográfica, con las peculiaridades propias del lenguaje audiovisual.

Esta nueva actividad cultural y de ocio se plantea como una puesta en común de ideas, comentarios y reflexiones acerca de la literatura y el cine.

Algunas de las obras literarias que se van a abordar en los clubes son, entre otras, “Las uvas de la ira” de John Steinbeck, “Los santos inocentes” de Miguel Delibes, “Lolita” de Vladimir Nabokov, “Muerte en Venecia” de Thomas Mann, “Los pazos de Ulloa” de Emilia Pardo Bazán, “El amante de Lady Chatterley” de David Herbert Lawrence, “Jarrapellejos” de Felipe Trigo, “El nombre de la rosa” de Umberto Eco, “Las vírgenes suicidas” de Jeffrey Eugenides, “El tercer hombre” de Graham Greence, “Los girasoles ciegos” de Alberto Méndez o “El gatopardo” de Giuseppe Tomasi di Lampedusa.

Junto a las reuniones, están previstas actividades complementarias, como charlas a cargo de escritores, guionistas y realizadores; asistencia a proyecciones de ciclos de cine de la Filmoteca de Extremadura; visitas a museos y otros centros culturales; convivencias con otros clubes de lectura...

Ambos clubes serán coordinados por el autor de este blog y quien escribe estas líneas, José Manuel Rodríguez Pizarro, licenciado en Comunicación Audiovisual por la Universidad de Extremadura, aficionado a la lectura y al séptimo arte, y a la relaciones entre literatura y cine.


Más información en:

www.bibliotecaspublicas.es/badajoz

www.bibliotecaspublicas.es/merida



miércoles, 2 de septiembre de 2009

Septiembre: recuerdos de la vuelta al cole...

Ha llegado septiembre. Y, con él, la vuelta a la casi total normalidad. Lejos de esas teorías, en muchos casos absurdas, que hablan del tan manido 'síndrome postvacacional', este mes es, para mí, uno de mis preferidos.

Me gusta volver a tomar el café en el bar de siempre, llegar al trabajo temprano, aprovechar la tarde para salir de compras, de paseo o, simplemente, para ir a correr con mi perro... He de reconocer que el calor me agota y que estos días de septiembre en que, pese a haber sol, el calor va bajando de intensidad, me encantan. A ello se suman las primeras lluvias, allá por San Mateo, cuando el campo, harto de sufrir durante mucho tiempo la dureza de un sol castigador, agradece la bendición de unas lluvias muy esperadas, no sólo por los agricultores.

Me encanta esperar a que se vaya el calor y se levante ese aire fresquito de septiembre que te da la vida, que llegue el otoño, que el cielo de vuelva plomizo, llegue el frío y comience a llover...

Quizá el primero de septiembre sea una jornada dura para muchos por todo lo que conlleva dejar de disfrutar de las vacaciones para volver al trabajo, a tu localidad, a tu casa, en definitiva, a tu círculo... En mi caso, aunque reconozco que a todos nos gusta estar de vacaciones, no supone mucho trauma... Más bien, todo lo contrario.

Septiembre es un mes de muchos recuerdos en mi cabeza. Cuando era pequeño contaba los días que faltaban para regresar al cole. Y, además, se encontraba la compra de los libros de texto nuevos para el comienzo del curso... Ese día, reconozco, era uno de los más queridos... En mi memoria han quedado grabados esas mañanas en que mi madre, mis hermanas y yo íbamos a la Librería Diocesana o a la Universitas, de Badajoz, en busca de los libros... Ya en casa, el olor a libro nuevo y el ritual que suponía el forrarlos suponían momentos únicos...

Luego estaba la, para mí, esperada vuelta al cole: el recuentro con los compañeros, con los maestros, con los recreos, con las tareas... Y el olor a goma de borrar, al forro de los libros, a las ceras, a la plastilina, a la tiza... Sin duda, recuerdos de hace ya algunos años. Y, en mi memoria, me veo sentado en el pupitre de mi clase, rodeado de mis compañeros, atendiendo las explicaciones de doña Antonia o de doña Marisa. Tras la ventana, comienzan a caer las primeras aguas de la temporada...